lunes, 18 de noviembre de 2019

El telescopio de Galileo

ERA SOMOS.
Del yo al nos.
Si siempre es difícil dirigirse a una asamblea, mucho más lo es en tiempos de Crisis. Como nos recordaba el otro día Vinko Papic, tanto en chino como en griego, de dónde proviene, Crisis significa oportunidad, solución. Aunque no se vea tan claro desde lo que ha sido precisamente puesto en duda, legitimidad y sea el objeto de la transformación. Y particularmente, si esa crisis, podemos proyectarla a todos los ámbitos en los cuales hemos estructurado nuestra sociedad.
Aun más, si como parece ser el caso, la sociedad es global y se articula de manera sistémica, es decir a la imagen de como nos lo recuerda la teoría del caos, que hizo célebre la formulación: “el aleteo de una mariposa en Peking, puede provocar un huracán en Nueva York” y ese dicho, evocador como el que más, que al contrario de su origen científico  “exacto” asociamos con la poética, y que es imposible no asociar con la situación actual de la guerra comercial entre China y USA, sobre la que volveremos, pero que en realidad remite a una transformación total de nuestras maneras de representar el mundo, dónde todos sus elementos independientemente de su orden de magnitud y proximidad relativa, están relacionados y donde la modificación que sufra uno de ellos, impactará en el conjunto.
Esto es lo que se conoce como una época de cambio de paradigma, o de revolución científica. Aunque podríamos incluir aquí el paso del mono al hombre, la Revolución neolítica que abarca el descubrimiento de la agricultura, el nacimiento de las ciudades que permite la emergencia de las castas, clases y de las religiones, entre otros momentos trascendentes. Han sido señalado tres en la historia reciente del hombre y la ciencia occidental, que vale la pena recordar por lo amplio de sus alcances: Galileo el siglo XVI, que vió que el sistema ptolemaico en vigor no era correcto, pese a la opinión de la iglesia y que la tierra giraba alrededor del sol. Luego Darwin, que probó la teoría de la Evolución y en tercer lugar Freud que nos enseñó que nuestros procederes y nuestra vida, no eran solo conscientes y racionales, sino que la parte más importante de ella ocurre a nivel inconsciente.
Dicho de otra manera, aunque no sale en la tele y probablemente si continuara la COP25 en nuestro país (¿han reparado ustedes, que la Revolución que se ha producido en Chile, tuvo el efecto de que cesamos de hablar del Cambio Climático?... Como si con una noticia hubiéramos sustituido la otra… Si no hubiera estado ello al centro de la revolución, por el mismo efecto multiplicador que hoy nos encontramos celebrando: no podemos desconocer el rol que juega, la gran cantidad de información que todos y todas (en castellano, cuando uno dice todos, se refiere, como en casi todas las lenguas , all… alles, wei jie… a una identificación de la especie).
Y así permítanme que refiera a dos condiciones que debe y espera cumplir este discurso: el primero es que siguiendo a E.Guba, refiera a componentes ontológicos, epistemológicos y metodológicos, es decir que cumpla con la obligación de “totalidad”, que no deje fuera categorías esenciales de orden. Por cierto, definir al ser o sujeto central, como ya lo he mencionado, para hablar de una unidad que reagrupa hombres y mujeres, ya que si no a la vida, ciertamente a la muerte nos iguala, así sea en su dimensión de eternidad. Aunque claramente, se trata del ser humano. Diría mi profesor, Lévi-Strauss, de sus condiciones de vida, de la gente, o de que manera se están relacionando en un espacio-tiempo determinado, las relaciones de reproducción, producción y lenguaje.
Una segunda cuestión tiene que ser afirmar mi seguridad, de estar siendo testigos y actores, como somos los humanos, cualquiera que sea la ideología que determine su origen y el contenido de clase del mismo, de un momento muy especial de nuestra historia. Lo que está ocurriendo no tiene parangón otro que el de Revolución, aunque el término no guste mucho a algunos y debamos definirlo primero entre todos, para ver si encontramos uno mejor. Imagino que estoy considerando el término como una transformación total, en todas las dimensiones en que podamos considerar la sociedad: como decía, en los tres ámbitos de relaciones de parentesco, relaciones de producción y cuestiones de lenguaje. También en sus expresiones de transmisión, como religión, ciencia y tecnología, es decir, como sistema de creencias. O dicho de otra manera, como se articulan estos tres medios, para constituir la sociedad en que vivimos.
Por la dimensión de ontología, me referiré a un poeta: “cuando hablamos de futuro, no se trata de prevenirlo, sino de ver si lo hacemos posible”.
Como dice PaulValery, en 1948, y que no tendría más importancia que la belleza, o su capacidad de hacernos pensar en las posibilidades de supervivencia, o de como la poesía tiene un rol filosófico porque incorpora dimensiones del tiempo y el devenir, si no fuera que -y es bueno remarcarlo, porque viene de exgergo en el SR1.5 del IPCC.
Por la  epistemología que es el lugar desde donde estamos refiriendo al sujeto que hemos definido como Ontología, valgan estas palabras en transformación, que están dando cuenta de un cambio que las mueve: como lo hemos planteado en Sol de Miel, planteando una tipología que toma los tres períodos por los que ha pasado la CMNUCC y considera que cada uno convoca a uno de los tres grupos de ciencias en que tradicionalmente, consideramos se divide la ciencia occidental: exactas, sociales y humanas, y así, estamos en la era del “espíritu”. Geistenwissenschaftenzeit.
Según hemos recién determinado, la cultura de la cual hacemos la radiografía, o mas bien el diagnóstico inicial para llegar a los instrumentos de CMNUCC (con irrupción de Suecia- Finlandia, en la Visión de Aland: que viene a encaramarse sobre los Diálogos de Talanoa, es que vamos a comenzar por definir la Visión, es decir la mejor imagen de la isla, que creamos posible. Y luego, hacemos el diagnóstico, vemos dónde estamos y marcamos desde el ideal, es decir en reversa, los pasos que nos llevarían allí.  La ventaja que la incorporación de la visión representa, es que ponemos en tensión dialéctica, los dos tiempos del futuro y del ahora.
Ustedes saben de la guerra comercial que se hacen USA y China. Hemos sabido de tal cantidad de conflictos y guerras en el último tiempo, que lo único que podría explicarlo, es que el presupuesto de USA en armas, en el año 2019, es de 1,25 Trillones de US S$, que es más que lo que gastan los 9 países que vienen después….
 Y quisiéramos que esto fuere teoría, como los números que cito, pero se refiere, como todos sabemos, a las guerras que hay en todo el mundo, ahora y que están al servicio del imperio del mercado. Y los casos de guerra, son permanentes, Iraq, Afganistán, desde el 2001, permanentes, Siria, Yemen, amenazantes, Irán, Corea del Norte, Venezuela, China, activos India-Cahemira, posibles, tantos lugares, avanzados, el extremo sur, que empieza a inclinarse sobre la Antártica con la máxima gravedad (Scrooc) y en términos Geopolíticos, (que es cuando un territorio se hace importante) que según he sabido, y eso tendrán que decirlo ustedes, porque aquí viven, que, de acuerdo a las particularidades locales, la isla está muy fregada. Hay un negocio que acrecienta su importancia estratégica, que tal vez, aunque sea a grandes rasgos, cabría la pena considerar y que convendrán conmigo nos pone en el “ojo del huracán”.
Entiendo que ya se ha hecho, un acuerdo, entre el gobierno y Huawei, para cablear en alta velocidad, para permitir, así la nueva generación digital, que permitirá bajar desde internet en tres segundos, y desde un celular, una película de 2,5 horas, por todo Chile, desde y hasta Punta Arenas. Entiendo que eso impactará considerablemente también en Chiloe. Y debemos considerar su importancia estratégica, para imaginar políticas a venir.
A propósito y no sale en las noticias
La onceava cumbre del foro Brics (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se reunió el 14 de este mes en Brasil. Se reanudaron las conversaciones sobre cooperación dentro del bloque y se firmó la Declaración de Brasilia. Reúne a cinco de las mayores economías del mundo, con un total de tres mil 100 millones de personas, más del 40 por ciento de la población mundial.
La víspera, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, fue el último orador en el Fórum Empresarial del Brics, en el primer día de actividades de la reunión cimera.
Propuso incrementar el comercio entre los países miembros, al dirigirse a los otros cuatro líderes del grupo de potencias emergentes (Vladimir Putin (Rusia), Narendra Modi (India), Xi Xinping (China) y Cyril Ramaphosa (Sudáfrica).
Durante el cierre de la cita empresarial, Xi Jing Ping dijo que el 30 por ciento del crecimiento de la economía internacional se debe a China y reforzó su intención de actuar cada vez más en una economía abierta.
‘Queremos abrir nuestra economía, aumentar nuestras exportaciones e importaciones”. También invitó a los países a unirse al megaproyecto de inversión en infraestructura global llamado Un cinturón, una ruta, a través del cual China invierte en puentes, puertos y ferrocarriles en docenas de países.
Tanto Xi como Putin criticaron el proteccionismo comercial que ha dominado gran parte de las conversaciones internacionales y que se incrementó durante el Gobierno de Donald Trump, hasta  comenzar la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
El Brics se ha convertido en un importante mecanismo de cooperación con beneficios mutuos y un foro de concertación en el escenario internacional.

Ahi estamos. Dialogos de Talanoa. Nuestra visión. Resiliencia.

Poiesis, poipnin...

domingo, 17 de noviembre de 2019

Dos links

COP25.


Nuestra ONG postuló y fue aceptada a la Zona Azul de COP25 en Santiago.
En vista de su no realización acá y su desplazamiento a Madrid, escribimos inmediatamente a la CMNUCC, para mantener y revalidar nuestro cupo allá.
Sigue el correo de respuesta al formulario on line de la WWF, que ofreció becas a los postulantes.



COP 25. A Madrid.

¿Cuál es el principal propósito de su viaje a la COP25? Indique las reuniones o eventos de los que pretende participar, así como toda la información adicional que considere pertinente a ser considerada para la asignación de los fondos.

Nuestro principal propósito en COP25, es establecer contactos para relevar la grave situación que enfrentan los ecosistemas de la Isla de Chiloe, donde el Cambio Climático agrava problemas ya estructurales, como falta de agua potable, contaminación por las industrias salmoneras, expansión de monocultivos forestales, tratamiento de residuos y basura y extracción indiscriminada con fines comerciales de turberas y pompones para exportación, entre los más importantes. Esperamos encontrar apoyo para realizar proyectos que puedan coordinar la mitigación de impacto y las oportunidades que presenta la transición hacia las ERNC y el Acuerdo de Paris (2020-2030), entre las organizaciones comunitarias y las comunidades indígenas, pescadores y agricultores del austral territorio, actualizando conocimientos para gestionar las posibles compensaciones entre los beneficios y los inconvenientes de los enfoques circulares, incluidos aquellos relacionados con los impactos climáticos de algunas tecnologías de "conversión de residuos en energía," que incineran basura para generar electricidad con la tecnología más avanzada, para escalar a cero impacto.

Así hemos establecido contacto y participaremos activamente, en el "2º Centro de Creación de Capacidades en la COP25, programado del 4 al 11 de diciembre, en Madrid por la CMNUCC". En razón de nuestra participación previa en los Diálogos de Talanoa (COP23, Fidji/Bonn) y de haber incorporado a nuestra práctica, la metodología de acción a través del relato, hemos adquirido interesante experiencia que compartir, en vistas de aumentar la ambición para que nadie quede atrás.

Al mismo tiempo, cabe señalar que la COP, consciente de la pérdida y el daño asociados con los impactos del cambio climático, incluidos los eventos extremos y los eventos de inicio lento, en los países en desarrollo, que son particularmente vulnerables a los efectos adversos del cambio climático, ha establecido el Mecanismo Internacional de Varsovia (WIM) para abordar esa problemática, considerando los grupos vulnerables como agentes de cambio, en lugar de víctimas, para poder incluirlos en las soluciones necesarias para un clima cambiante. 

El Comité Ejecutivo del WIM, ha organizado de un bloque de medio día, durante el segundo Centro de Creación de Capacidades, destacando los componentes de creación de capacidades en el plan de trabajo, centrándose en fortalecer el diálogo, la coordinación, la coherencia y las sinergias entre las partes interesadas. 

Esperamos ahondar en la consideración y tratamiento operativo de Daños y Pérdidas No Económicos o Non Economic Losses and Dammages (NELD) y sus importantes alcances culturales, políticos y legales, puestos naturalmente de relieve por los sucesos acaecidos Chile y que se tradujeron en la no realización de COP25 en nuestro país.


Meltwater Pulse 2B

domingo, 6 de octubre de 2019


Hipocampo (tardío) de la COP25.
(La necesidad de un centro neurálgico de transmisión autónomo).
Por un análisis situacional.
"Las sociedades humanas pueden ser concebidas como un vasto sistema de comunicaciones, en el cual hay intercambio de mensajes entre entre los grupos y los individuos, a tres niveles distintos, pero complementarios e interrelacionados: reproducción, producción y lenguaje". Claude Levi-Strauss. 


Recién en marzo de este año, luego de afianzar las formas de financiamiento y diseñar su distribución entre privados, el gobierno anunció la realización de la COP25 en Chile, en diciembre de este año. Desde que así fue acordado, por decisión de las naciones miembros de la Convención Marco de Naciones Unidas de Cambio Climático (CMNUCC), por el retiro de Brasil, en la COP24 de Katowice, en diciembre 2018, advertimos, en distintas publicaciones, que el retardo en informar y la ausencia de canales adecuados, significaba desaprovechar las posibilidades de generar plataformas participativas de participación ciudadana que permitieran establecer una relación más estrecha entre ciencia ciudadana y política. Sin embargo, no era justo sorprenderse, considerando la historia de secretismo con que se ha manejado tradicionalmente desde el Estado, todo lo que tenga que ver con las Relaciones Exteriores de Chile, dentro de la potestad de las cuales radican las relaciones con la CMNUCC.

A partir de entonces, el Colapso Climático, no ha cesado de inundar los media informativos cotidianamente, generando una verdadera sobrecarga de información relativa, muy bien recogida por las empresas, universidades y organizaciones de todo tipo, que no se condice con el silencio y la inactividad con que la sociedad chilena consideraba el problema anteriormente, pese a estar instalado en la agenda internacional desde la Cumbre de Río, en 1992 y específicamente desde 1995, cuando en Berlín, Alemania, se realizó la primera Convención Marco de Naciones Unidas de Cambio Climático (CMNUCC), o COP por las siglas en inglés de Conferencia de las Partes.  

Más allá de los esfuerzos aislados de las instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil por informarse desde medios internacionales del Cambio Climático y de participar en la medida de sus posibilidades, por conseguir financiamientos internacionales para sus proyectos y comunicar en sus páginas web del avance de sus investigaciones y trabajos, debemos reconocer que no hemos sido capaces de integrar la información internacional y los trabajos realizados en una perspectiva sinérgica de acción conjunta, de Gobernanza Policéntrica, para poner de manera sistemática al alcance de la sociedad toda, la urgente realidad del Cambio Climático.


La realización de la COP25 en nuestro país, transformará a Chile en el centro mundial de las miradas internacionales sobre Cambio Climático. Esto es mucho más que una simple tarea de gobierno que permitirá a nuestros funcionarios una posición destacada y plena ocupación de la capacidad hotelera de Santiago para las fiestas de fin de año. Tiene que ver con tres temas fundamentales que se han destacado desde los Acuerdos de Paris el 2015, que se han hecho más urgentes desde entonces en la COP23 y que adquieren plena formulación en julio del año pasado con la entrega del informe especial SR15 del IPCC.

1. Absoluta seguridad científica de las causas antropogénicas (de nuestro sistema histórico de producción y consumo) del Caos Climático. 2. De la urgencia absoluta del llamado, a tomar decisiones políticas coherentes con la información científica: el Secretario general de UN ha sido muy claro, nos quedarían 12 años (11…) para no alcanzar cifras de recalentamiento terrestre irreversibles. 3. Que por pequeña que la contribución de cada quién y de sectores específicos de la sociedad pudiera ser, estamos todos llamados a hacerla: medio °C de aumento global de la temperatura impactará en la vida de millones de personas. Como dijo el Secretario General de UN, “todos estamos llamados a aumentar nuestros esfuerzos para que nadie sea dejado atrás” y ello refiere a gobiernos, universidades, empresas, organizaciones y personas.

Tal como desde el nombre del informe científico especial del IPCC (SR15) lo señala, los efectos visibles y dramáticos del Cambio Climático, se dan en un mundo dividido como nunca antes entre los ricos y los pobres. Un informe reciente de la ONG internacional Oxfam lo señala: el año pasado el 1% más rico del planeta ganó US$2.500 Millones al día, mientras al 10% más pobre, en el día, perdía US$ 500 M. Las 8 personas más ricas del globo tienen el mismo ingreso que toda la mitad más pobre: 3.700 millones de personas. Como sabemos, esta realidad no nos es ajena en nuestro país. En una proyección de junio, la Reserva Federal de Norteamérica, FED, que abarca desde el año 1999 al 2018, la cifra refleja las dimensiones astronómicas de esta realidad: en éste período, el 1% más rico del mundo, ha tenido ingresos por 21 trillones de US$, la mitad más pobre, ha perdido US$ 900 billones.

Sabemos que las expresiones concretas de éste hecho no son ajenas, en los territorios y localidades, donde a través de estructuras legales y constitucionales, perfectamente concebidas para ese fin, el modelo que considera a la naturaleza como un recurso económico, permite arrasar cada vez más con el bien común en beneficio de la propiedad privada.Un poco menos, aunque se empieza a hacer conciencia, se sabe de como esta realidad afecta la salud física y social de las personas. Los estudios señeros en el Reino Unido, de los "determinantes sociales de la salud", recogidos en algunas experiencias en nuestro país, a principios de los 2000, aunque posteriormente interrumpidos por no tener los apoyos políticos necesarios, son una buena puerta de entrada a esta problemática, que de todas maneras ya ha cobrado reconocimiento.

Desde principios de año, hemos publicado semanalmente artículos en Pagina 19, tratando de llamar la atención sobre esta realidad, que no hemos alcanzado a bien dimensionar en nuestro país. Limitados por la ciega ambición de riqueza cortoplacista de unos y constreñidos por el discurso socialdemócrata dominante de lo políticamente correcto, al cual debieron sumarse los otros, la sociedad chilena está lejos de dimensionar la gravedad del desastre climático que nos afecta como especie y que, junto a las demás formas de vida, nos pone en el umbral de la extinción. Nuestras acciones han entrado con facilidad a ocupar únicamente el ámbito formal y propagandístico de los gobiernos de turno, sin traducirse en las acciones urgentes y efectivas que la sociedad toda requiere.

Sin duda que como se reconoce en los organismos especializados de UN, el primer paso necesario para revertir esta situación y recoger el principio de la resiliencia para hacerle frente, movilizando todas nuestras capacidades en el máximo esfuerzo, es la creación de capacidades y una estrategia comunicacional que haga claridad sobre las condiciones reales de lo que pasa. Esto no puede sino ser una tarea colectiva.

Una plataforma de transmisión que permitiera sinergia entre los distintos esfuerzos de universidades, organizaciones de la sociedad civil y eventualmente mediación con las instituciones de gobierno sería una acción tan apropiada como necesaria, para contar con un cuerpo autónomo que permitiera actualizar, hacer proposiciones, seguimiento y evaluación a la COP25, en Chile.

El llamado a coordinar una acción vital y colectiva de éste tipo y establecer sugerencias, para ser difundidas, discutidas y sancionadas de manera lo más amplia posible -de acuerdo a estrategias y modalidades consensuadas-, con la comunidad científica, sus diferentes facultades académicas, los empresarios, los trabajadores y las organizaciones de la sociedad civil, así como con el gobierno y los servicios, requeriría un cambio fundamental en nuestra gobernanza, y en la forma en que se toman las decisiones. 

Paradojalmente, tenemos que decir que el país, ha concebido instrumentos políticos y legales para superar esta situación y que así no todo está perdido, aunque su implementación se ha visto naturalmente retardada, ya sea por oposición franca de ciertas autoridades, como por carencia (precisamente) de instrumentos de deliberación participativos que respondieran a la concepción política de avanzada de su concepción. Prácticamente desconocida por motivos políticos, pasó el Instructivo Presidencial N°007 de la presidente Bachelet, de agosto del 2014, que actualizaba la Ley 20.500 de participación ciudadana, corregía las normas de participación ciudadana de los servicios del Estado y creaba los Consejos Consultivos de la Sociedad Civil, dando un paso mas allá hacia el carácter necesariamente vinculante que debe tener la participación ciudadana, si quisiéramos efectivamente corregir desde el Estado la deficiencia intrínseca que supone hacer participar a la gente sobre la marcha de la institución y luego no contemplar sus opiniones. 

Es conveniente, sobre todo en tiempos de tanta oscuridad, y de avances tan grandes y veloces del Desastre Climático, rescatar que personas del gobierno anterior, trabajaron para desarrollar los principios contemplados en esos instructivos, que inequívocamente establecían formalmente  la necesidad de pasar desde la actual "democracia representativa", hacia una etapa superior de "democracia deliberativa", lo que bien vistas las cosas, de haber desarrollado campañas de enseñanza específicas, que contemplaran el diálogo y la retroalimentación, nos habrían puesto en un excelente pié para afrontar los problemas derivados de Campo Climático, que a distintos niveles, son problemas de gobernanza.

Así, de toma de permitiría crear una tan importante como necesaria contribución al diálogo y la sinergia social, en la perspectiva de la creación de capacidades, para "aumentar nuestra ambición de hacer frente al Cambio Climático y que nadie sea dejado atrás" (A. Guterres, Secretario General de NU, https://www.un.org/press/en/2018/sgsm19205.doc.htm). 

Por otra parte, la intuición de proponer una forma concreta de retroalimentación en la figura del hipocampo, no es exenta de significado. Dos alcances cabe señalar al respecto, interno, referida al órgano de nuestro cerebro y externo a nuestra especie, la del caballito de mar. En efecto, así llamada por analogía formal con el citado animalito, ésta zona del cerebro, ubicada por debajo del hipotálamo, es a la vez la depositaria de la memoria y la generadora de nuevas células cerebrales o neuronas, que hasta no hace mucho se creían fijas en número al momento del nacimiento y que sólo se iban perdiendo en el curso de la vida. Ahora se sabe que ello no es así y que el lugar donde se reproducen nuevas neuronas es el hipocampo. 

Y en lo que concierne al hipocampo, caballito de mar, es digno de destacar que éste es uno de los pocos ejemplos en el reino animal, en el cual el macho da a luz, reificando lo que en el resto de las especies vivas y con tanta dificultad de comprensión entre los géneros, sólo aparece como una relación exclusivamente simbólica. En tiempos en que el mercado capitalista del trabajo y del consumo ha sembrado tanta incomprensión, virulencia y oposición entre hombres y mujeres, en evidente desmedro de los niños, esperaríamos que proponer esta figura al pensamiento, podría jugar un rol de catalizador de instancias comprensivas y de superación de diferencias entre los géneros, contribuyendo así a concentrar todas las energías sociales para enfrentar debidamente los problemas del colapso climático, que pese a lo externo de sus manifestaciones, no son otros que los de la división del trabajo y de la propiedad privada.